Prensa MPPS. Durante la semana del 13 al 19 de mayo, se celebra la Semana Mundial de Sensibilización sobre la Sal, con el objetivo de concienciar a la población sobre los riesgos asociados con el consumo excesivo de sal y promover hábitos alimenticios más saludables.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), el consumo excesivo de sal está relacionado con un mayor riesgo de desarrollar enfermedades cardiovasculares, como la hipertensión, que es una de las principales causas de muerte en el mundo. Por esta razón, es importante reducir la ingesta de sal en la dieta diaria y optar por alimentos bajos en sodio.
Durante esta semana, se llevarán a cabo una serie de eventos y campañas para sensibilizar a la población sobre la importancia de una dieta equilibrada y baja en sal. Se insta a la población a leer las etiquetas de los alimentos y a optar por opciones más saludables, como frutas, verduras frescas, tubérculos, hortalizas, leguminosas, y a cocinar en casa en lugar de consumir alimentos procesados con alto contenido de sal.
¿Cuáles son los alimentos bajos en sal y sodio?
Verduras, como el brócoli, remolacha, okra (quimbombó), espinaca, verduras congeladas sin mantequilla, ni salsas añadidas, verduras enlatadas que contengan poco sodio o no tengan sal añadida (puedes enjuagarlas para remover parte del sodio), Tubérculos como lo es la papa dulce (batata o camote), hortalizas como la zanahoria y legumbres como el edamame (alubia o frijol de rama), frutas fresca, como manzanas, fresas, naranjas, mangos, plátanos, frutas congeladas, pimentón (pimiento), frutas enlatadas o secas sin azúcares añadidos.
Granos y granos integrales
Incluso los alimentos que no tienen un sabor muy salado, como el pan y las tortillas, pueden aún agregar mucho sodio a tu plato. Granos integrales, como arroz integral o silvestre, quinoa o avena, pasta y cuscús de trigo integral o de otros granos integrales, cereales para el desayuno (fríos o calientes) de granos integrales sin azúcares añadidos, como la avena o el trigo triturado, cotufas (palomitas de maíz) sin sal y papas fritas o pretzels con poco sodio, pan, roscas (bagels), panquecitos (bollos o muffins en inglés) y tortillas, 100% integrales.
Nueces y semillas sin sal, frijoles (porotos) secos, chícharos (alverjas, arvejas, guisantes) y lentejas, porotos negros y garbanzos, frijoles enlatados etiquetados como “sin sal añadida” o “bajos en sodio”. Se recomienda lavarlos para remover parte del sodio.
Proteína animal
Elige carnes bajas en grasa, aves, pescados y mariscos frescos o congelados en vez de procesados, que a menudo tienen más sodio. Si el empaque tiene una etiqueta de información nutricional, busca los que tengan 5% o menos del valor diario recomendado de sodio. Pescados o mariscos frescos o congelados, pechuga de pollo o de pavo sin piel ni adobo, cortes de carne de res o de cerdo bajos en grasa.
En este sentido, es fundamental que la industria alimentaria también juegue un papel activo en la reducción de la sal en los productos que comercializa, para contribuir a una sociedad más saludable y consciente de los riesgos asociados con el consumo excesivo de sal.
Durante la Semana Mundial de Sensibilización sobre la Sal, Desde el Ministerio del Poder Popular para la Salud (MPPS), invitamos a todos y todas a reflexionar sobre sus hábitos alimenticios y a tomar medidas para reducir el consumo de sal en beneficio de la salud de todos. Juntos, podemos hacer la diferencia y promover un estilo de vida más saludable para las generaciones venideras.
Gestión comunicacional MPPS