Prensa MPPS. – Este 29 de octubre, se conmemora el Día Mundial del Accidente Cardiovascular (ACV), para concientizar a la población sobre la gravedad de esta enfermedad, que es posible prevenirla y, sobre todo, detectarla para poder actuar con velocidad. Muchas de las personas que sobreviven a un ACV, quedan con algún tipo de discapacidad permanente. En estos casos la rehabilitación posterior es de vital importancia para llevar una vida significativa y lograr la mayor autonomía posible.
Según la Organización Mundial de la salud (OMS), diez años atrás una persona sufría un ACV de cada seis, hoy es uno de cada cuatro, por lo que recomienda un estilo de vida más saludable, con la ingesta de proteínas, hacer regularmente algún tipo de actividad física, eliminar o disminuir el tabaquismo, el alcoholismo, sedentarismo entre otros hábitos que puedan atentar contra la salud integral del individuo.
El Ministerio del Poder Popular Para la Salud (MPPS), a través de la dirección general de Articulación de Programas, Servicios y Redes de Salud ha realizado en conjunto con las autoridades estadales, conversatorios presenciales desde los establecimientos de salud de cada entidad. Desde el MPPS se trabaja para promover estilos de vida saludables y conocer esta patología también denominada, ICTUS, accidente cerebrovascular, embolia o trombosis.
La información fue suministrada por Anggy Rodríguez, directora general de Articulación de Programas, Servicios y Redes de Salud, quien agregó que en el foro chat participaron un total de 5 mil 200 personas a los cuales se les suministró material de apoyo para conocer a profundidad la patología y como apoyar a familiares de pacientes que estén o hayan pasado por esta situación de salud.
Por otra parte, Reymon Ayala, residente del tercer año del Posgrado de Neurología del Hospital Vargas de Caracas, explicó que existen dos tipos de ACV, y es la segunda causa de discapacidad a nivel mundial, acotó que “el isquémico y el hemorrágico: el isquémico puede ocurrir en diferentes regiones del sistema nervioso central y el hemorrágico, como su nombre lo indica es la ruptura de los vasos sanguíneos del cerebro, a simple vista el paciente presenta las mismas manifestaciones clínicas de un ACV hemorrágico o isquémico” señaló.
Ayala también informó que los síntomas son: “estas manifestaciones clínicas pueden ser dificultad para articular las palabras, desviación de los rasgos faciales hacia el lado contra lateral, disminución de la fuerza muscular de forma brusca por lo general de un hemicuerpo, y que sólo en una neuroimagen se puede distinguir si el ACV es isquémico o hemorrágico”.
También dijo Ayala, “que el consumo de drogas, alcohol, tabaco, la obesidad, sedentarismo, la diabetes millitos, enfermedades de base como hipertensión, esta última como factor de riesgo número uno para que un paciente pueda desarrollar un ACV. Es importante señalar que un ACV puede suceder a cualquier edad, pero de manera general en pacientes de edad avanzada, en cuanto al tratamiento debe ser aplicado de forma rápida para que el paciente pueda tener más oportunidad” finalizó.
29 de octubre se conmemora el Día Mundial del Ataque Cerebrovascular (ACV). Este año, el lema mundial de la fecha es “unos minutos pueden salvar la vida”.
Gestión Comunicacional/MPPS