Prensa MPPS-. En el estado Cojedes la Casa de Abrigo María Casilda Flores continúa garantizando atención medica de calidad y oportuna en las diferentes consultas y servicios de salud a mujeres embarazadas provenientes de comunidades remotas de la región. Este centro tiene como objetivo brindar atención y apoyo a las parturientas y sus familias, mejorando las condiciones de salud y bienestar en la región.
En este sentido, esta Casa de Abrigo Materno ofrece varios tipos de apoyo a las mujeres embarazadas, especialmente aquellas con alto riesgo obstétrico o que viven en zonas alejadas del centro médico.
De igual formas, el apoyo incluye, Albergue donde brinda alojamiento a las mujeres en los últimos días de embarazo, permitiéndoles esperar el momento del parto cerca de los servicios médicos tales como atención especializada para mujeres con alto riesgo obstétrico, protección y cuidado que forma parte de los programas del Gobierno Bolivariano para mejorar la calidad de vida de las mujeres embarazadas y sus hijos, a través de la Misión Niño Jesús.
Sin embargo, esta casa de Abrigo, viene siendo un Refugio de Esperanza en el corazón del municipio Tinaco, en el cual se encuentra un símbolo de solidaridaridad, que ofrece un apoyo y refugio a las futuras madres de la región.
Además, el compromiso de esta mencionada Casa de Abrigo va más allá de la simple provisión de un refugio, se les ofrecen herramientas necesarias para alimentar a sus bebés correctamente y se les enseña la importancia del núcleo familiar en el proceso de gestación y tras el nacimiento.
Este aprendizaje no solo apoya su salud física, sino que también fortalece su autoestima y capacidad para tomar decisiones informadas sobre el futuro de las gestantes y el de sus hijos.
Una vez más, el impacto positivo de este centro de Abrigo es resultado del trabajo en conjunto del Gobierno Bolivariano que es liderado por el presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro a través de la ministra del Poder Popular para la Salud (MPPS), Dr. Magaly Gutiérrez que han dedicado en velar y garantizar la salud a todas mujeres embrazadas.
Gracias a este esfuerzo colectivo, muchas vidas han sido transformadas, y el centro se ha consolidado como un lugar acogedor y solidario donde cada mujer puede encontrar no solo un refugio, sino también el aliento necesario para asumir la hermosa tarea de la maternidad con confianza y amor.
Prensa Cojedes